LA AVENTURA DE VIVIR

“EL LOGRO MÁS IMPORTANTE QUE PUEDES ALCANZAR EN TU VIDA, ES CONOCER TU VERDADERA ESENCIA”
-EcKhart Tolle-
La vida es fantástica desde donde se mire. Y llegué a esta conclusión después de mucho tiempo de reflexionar muchas cosas, que hoy te quiero compartir.
Mientras más crecemos, la vida nos invita continuamente a replantearnos, a buscar, a caer, a no entender, pero igual a sentir amor a través de un abrazo, de un beso, a sentir gratitud por lo recibido, a saborear una rica comida, a disfrutar un atardecer, a gozar el mar, a escuchar el canto de los pájaros, a paladear un rico café, a compartir una charla divertida con los hijos, la familia o los amigos, a lograr lo que no imaginábamos, a bailar en la sala, a hacer muertito en la piscina o ver una hermosa flor de nuestro jardín…
Sin embargo, cuando no nos sentimos en armonía, poner en orden todo lo que pensamos y sentimos sí que es complicado. Me ha llevado años entender muchas cosas y aún hoy creo que no sé mucho, pero te comparto mis más íntimas reflexiones. Yo veo las cosas y la realidad de la siguiente manera: lo que somos (formado por lo que percibimos, sentimos, pensamos, creemos, es decir, nuestra esencia) y lo que nos rodea (familia, amigos, trabajo, lo que hacen y dicen los demás que tiene que ver conmigo) y todo lo que interactúa con mi ser (redes, mensajes, gente que me topo en la calle, el clima, etc.).
Entonces este interactuar de lo que somos con lo que nos rodea, a veces nos complica un poco la vida y descubrimos que la realidad propia no es la misma para todos los demás. Porque lo que si he aprendido es que; lo que yo veo y siento, nadie lo ve y lo siente igual, aquí radica lo que siempre nos han enseñado… somos únicos e irrepetibles. Pero al mismo tiempo a veces esto nos enreda la vida.
Un ejemplo sencillo para explicar la realidad es el siguiente, cada quien tiene sus propios lentes y son únicos, están graduados según las medidas de nuestras creencias, miedos, cultura, genética, religión y eso hace que nuestra graduación sea única… y bajo ese filtro vemos la vida y lo que nos sucede. Te pondré un ejemplo para explicarme mejor; si a varias personas les muestro una imagen (un vaso medio vacío o medio lleno), cada quién se va a fijar en aspectos diferentes y va a percibir algo personal. Este ejercicio de interpretar una imagen no falla y es solo una imagen, pero así ocurre con lo que escuchamos, vemos y decimos. Las personas lo captan de forma diferente. Una amiga muy querida me decía el otro día, que en un curso le enseñaron que las personas dicen y dan lo que tienen dentro, por lo tanto, según se encuentre mi ser, es como veo el vaso, medio lleno o medio vacío, según mis lentes… que verdad tan cierta, lo que soy es lo que doy, es como veo y también como lo que digo. De mí solo puede salir lo que tengo dentro, ya que, de la NADA, NADA SALE.
Pero esto no acaba ahí, porque además tenemos una mochila que se va llenando de experiencias, unas pesadas (tristezas, decepciones, dificultades, heridas, fracasos, situaciones no resueltas, rencores) y otras livianas y valiosas (aprendizajes, situaciones de perdón y reconciliación, éxitos, logros, amistad, amor, cariño, encuentros con Dios) y esta mochila igual es única, solo yo sé lo que tiene, nadie más lo sabe, y aunque yo comparta algunas cosas, nadie la ha visto por dentro, solo yo y nadie, sabe lo que pesa para mí, aunque alguien me ponga el hombro para ayudarme a cargarla, nadie siente el peso completo que yo siento, por lo que hay dentro. NADIE.
Entonces todo eso tiene que ver con lo que soy, lo que pienso, siento, como actúo y como es mi realidad… Pero, ¿dónde está el secreto de la vida para ser feliz, lograr mis sueños, alcanzar mis metas, atreverme siempre, gozar cada día como si fuera el único?
Millones de libros se han escrito, desde sabidurías milenarias, religiones, iluminados, psicólogos, científicos, yoguis, y aún habemos muchos, que no entendemos el camino… que seguimos con tristezas, ansiedades, depresiones, miedos, angustias, insomnios, resentimientos y sentimos que cada vez aparecen nuevas dificultades, una y otra vez… y nuestro lente se empieza a empañar, nuestra maleta empieza a pesar más y nuestra realidad toma otros matices. En otras ocasiones logramos sacar de la mochila recursos útiles y logramos desempañar los lentes y vuelve la claridad. Otras veces logramos la armonía de la vida un rato, pero al poco tiempo vuelve a surgir en nosotros sentimientos de insatisfacción y de deseo que se vuelve sufrimiento, carencia, soledad, angustia… Entonces viene la pregunta de muchos de nosotros… que debo de hacer para sentirme pleno SIEMPRE… ¿Será imposible? Talvez esto no existe o ¿Será que se puede tener acceso a esta posibilidad? O no es real, porque siempre algo sale mal o surge un problema o aparece mi mente que no queda satisfecha…
Creo que Dios se confundió al crearnos, le faltó una pieza… el botón del equilibro de la vida. Así como el agua cuando está bien balanceada (PH) está clara, pura y no vive nada malo en ella, así debería ser nuestro botón al tener una vida armoniosa, le damos click y que la vida así se quede, que la sabiduría de ser feliz no se vaya de mí, y que logre permanecer para siempre en ese estado. Uff que maravilloso seria, ya solo tendría que trabajar en mí, para llegar a este punto y apretar el botón de guardar y listo, como un archivo, mis lentes quedarían limpios para siempre y ya sabría que sacar de la mochila y que utilizar para seguir mi vida plena… wow sería genial o no?
Pero la cosa no es así y Dios lo pensó perfecto… la vida se trata de:
- Agradecer a Dios cada mañana por la vida que me dio y lo que me rodea.
- Agradecer en la noche por todo lo que este nuevo día me trajo.
- Atreverse a vivir cada día, descubriendo que cada amanecer es una oportunidad de ser mejor y de dar lo mejor a mí mismo y a los demás. Para que la chispa de la vida no se apague.
- Descubrir mi propósito de vida (te recomiendo escribirlo) y así, poder gestionar mis emociones saludablemente, que no me lleven a reaccionar como un potro salvaje. Todos los días darme unos minutos y centrar mi espiritualidad y entrar en calma, en armonía, en paz y así sentirme en equilibrio.
- Liberarnos de los pensamientos negativos y limitantes, ver lo positivo de cada cosa y el aprendizaje de cada situación. Vivir en el presente aquí y ahora. Dejar el pasado, pues ya pasó y el futuro, que no me cause ansiedad porque no existe.
- Ser resiliente, pro activo y alegre, que la sonrisa sea el reflejo de mi alma.
- Meditar, respirar y estar conmigo mismo cada día y en el momento que lo necesite. Solo es cuestión de estar consciente y detenerse, respirar y entrar de nuevo armonía, esto lo puedes hacer donde estés, en la casa, trabajo, incluso manejando.
- Tener coherencia entre mi mente, cuerpo y espíritu.
- Escuchar la sabiduría de mi corazón llamada intuición.
- Dar amor a todos… convencida que EL OTRO TAMBEN SOY YO… es mi espejo por eso lo amo, lo acepto y soy empática.
Se oye increíble ¿Verdad? Pero será que ¿Es real? ¿Posible? O ¿Es utópico? ¿Será que alguien ya lo ha logrado?
De nuevo te comparto mi aprendizaje…
Esto es como el deporte se entrena diario, a veces se gana, otros días no… pero se sigue adelante y con más empeño, aun cuando se pierde y se disfruta mucho cuando se gana… ¿Y el premio máximo? se logrará al final de la vida. Las medallas de clasificación son pasos hacia la meta final… en el camino habrán compañeros de vida, gente que solo está de paso, niños que seguirán tus huellas, amigos que los llevarás de la mano, gente que te echará porras y te levantará si caes, de todo habrá, pero lo que nunca debe desaparecer es la llama que mantiene vivo mi propósito de vivir, como la de las Olimpiadas, que se prende con rayos solares que representan su pureza, y siempre está prendida durante la competencia, así DEBE SER nuestro propósito de vida, siempre prendido durante toda la vida. Puede cambiar de lugar o a veces bajar la intensidad, pero nunca desaparecer. NUNCA.
Para comprender un poco más de lo que hablo, te comparto las enseñanzas de un sabio antiguo:
Thomas Merton (Monje, escritor católico y místico estadounidenses) esto nos enseña en su libros…
- El hombre está plenamente vivo sólo cuando, tiene la experiencia genuina, al menos hasta cierto punto, de dedicarse espontánea y legítimamente al propósito real de su existencia personal. El hombre nuevo.
- La felicidad no es cuestión de intensidad sino de equilibrio, orden, ritmo y armonía.
- En una palabra, para que el hombre viva, debe alcanzar una vitalidad integral, completa. Todo debe ser vida en él, en su cuerpo, sus sentidos, su mente y su voluntad. El hombre nuevo.
Te invito a descubrir lo Sagrado que hay dentro de ti, estamos creados con una perfección absoluta y todo nos lo dio Dios para ser feliz y entender cómo funciona la vida. Solo que es nuestra tarea encontrar en nosotros este camino, esta sabiduría y ponerla en acción. Te invito a revisar nuestros lentes para limpiarlos, conociendo nuestra esencia, para poder tener empatía y compasión con los demás, pues todos somos diferentes en todo, cada quien tienen su propios lentes. Saquemos de la mochila lo que no sirve, para que no pese tanto y el entrenamiento diario no sea tan pesado, dejemos rencores, envidias, miedos, orgullos y pensamientos limitantes, para que “TODOS LOS DIAS SALGA DE MI CORAZÓN LO MEJOR DE MI”, no importa la situación que esté pasando, esta será una gran medalla para tu corazón.
La vida de felicidad es un entrenamiento diario e implica estar orientado hacia los demás. Es una aventura que vale mucho la pena disfrutar.
Espero que mi estudio y experiencia te sirva de algo, porque si todos compartimos lo que descubrimos y vivimos, la vida se llenará de la sabiduría de todos.
Mucho camino me falta por andar, pero mucho ya transité también…. Te deseo una vida nueva cada día, aprendizajes llenos de sabiduría, un Espíritu plagado de Dios, escúchalo, recuerda que él nos habita. Y por último, que tu llama de fuego y tu propósito de vida, guíen tus pensamientos y tus actitudes hacia la vida que siempre soñaste tener, por que tus hijos aprenderán a vivir esta aventura de LA MEJOR.
Un abrazo
Xiomara Sosa.
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